IDENTIDAD

“Enseñamos a nuestros alumnos a vivir en la Verdad que los hace libres, brindándoles la oportunidad de vivir una vida cristiana como miembros de una comunidad”

San José de Calasanz

Nuestro Santo Fundador nació en España en 1557 pero desarrolló la mayor parte de su vida y apostolado en Roma.

El contacto con la pobreza lo conmovió profundamente y despertó en él la vocación de educar a los más postergados de la sociedad en nombre de Jesús.

Con la convicción de que la educación académica y moral era la mejor herramienta para luchar contra la pobreza y la degradación moral de la niñez y la juventud, en 1597 funda la primera escuela pública, popular y gratuita de la edad moderna de Europa, la primera Escuela Pía.

Ciertamente guiado por Nuestro Señor, Calasanz generó una verdadera innovación educativa en su tiempo, sistematizando la estructura escolar (fue el primero en dividir a los alumnos en grados según sus edades) y volviéndola popular, transformando a la escuela en un impresionante vehículo de promoción personal y social.

Para dar continuidad a esta obra evangelizadora, fundó la “Orden de los Clérigos Regulares pobres de la Madre de Dios de las Escuelas Pías”, más conocida como Orden de las Escuelas Pías o “de los Padres Escolapios”, que es hasta el día de hoy la heredera de este legado de amor y santidad.

Carisma Escolapio

El lema que San José de Calasanz legó a los Escolapios “Piedad y Letras” testimonia cabalmente el humanismo cristiano que caracteriza a la Orden de las Escuelas Pías y a la educación que imparte.

En las Escuelas Pías cultivamos, a la vez y en conjunto, tanto los conocimientos que permiten a nuestros alumnos participar de los bienes de la cultura así como las virtudes morales y teologales necesarias para su crecimiento espiritual y participación en los dones de la Salvación y el amor a la Patria y respeto a sus símbolos.

Buscamos desarrollar lo mejor de las capacidades de nuestros estudiantes, y por eso nos esforzamos para brindarles algo más que una educación integral. En nuestras escuelas, los niños y jóvenes aprenden a vivir en la Fe, respetar a los demás y tener las más altas expectativas de lo que pueden lograr en su vida personal y profesional.

Los Escolapios nos preparamos para educar nutriéndonos de la sabiduría de la Iglesia y su Magisterio, de nuestra propia tradición pedagógica, y de lo que la ciencia de la educación ha desarrollado a lo largo de la historia, siendo conscientes de que esta cooperación la debemos realizar en nuestro tiempo, en nuestra patria y con nuestras peculiaridades.

Nuestra Historia

Los Padres Escolapios llegaron a Buenos Aires en 1870, comenzando una escuela en la Parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Cuatro años después reciben en donación el terreno donde hoy se erige el Colegio Calasanz, el cual comenzó a construirse el año siguiente, siendo inaugurado en 1891.

En 1915 se construyó el templo parroquial, primero en el mundo dedicado a San José de Calasanz.

En sus más de 125 años de historia, el Colegio ha tenido una profunda incidencia en el barrio y en la ciudad entera, con miles de egresados que se han cultivado en la Piedad y las Letras.

Somos un Colegio con historia e identidad, raíces fuertes que sostienen un árbol frondoso y fructífero. Unirse al Colegio Calasanz es formar parte de esta gran familia y de esta historia escrita en torno a la Misión de Calasanz de educar a los niños y jóvenes, construyendo esta comunidad salvífica que muestra el camino hacia Dios por la Piedad y las Letras.